El gato Snowshoe, un híbrido (mezcla) del siamés y el americano de pelo corto, fue inicialmente un error en el cruce. Sin embargo, es uno de los felinos más llamativos y bellos que se crían actualmente. Sus ojos azules son llamativos, y su pelaje es suave y liso. El clásico, o «mitted», Snowshoe es conocido por sus extremidades oscuras y sus patas blancas, con una cantidad mínima de blanco en la cara. Atractivo y cariñoso, el Snowshoe es una mascota maravillosa para tener en casa.
Características del gato Snowshoe:
- Cuerpo elegante y bastante musculoso con una cola que se estrecha ligeramente.
- Patas blancas de tamaño medio que sostienen unas piernas ligeramente musculosas.
- Orejas medianas sobre una cabeza ancha y en forma de cuña.
- Pelo suave y liso, sin subpelo.
- Ojos azules y ovalados.
Personalidad del gato Snowshoe:
- Muy amistoso y afectuoso.
- Adaptable.
- Curioso e inquisitivo sobre el mundo que lo rodea.
- Cariñoso y amable.
- Vocal, pero no tan ruidoso como los siameses.
Origen:
El gato Snowshoe apareció por primera vez como un error en los programas de cría de siameses. Sin embargo, en la década de 1960, una criadora llamada Dorothy Hinds-Daugherty reconoció el valor potencial de estos siameses con patas blancas y comenzó a criarlos por su cuenta. Al principio, el Snowshoe tuvo muchos críticos, sin embargo, en la década de 1970 la criadora Vikki Olander presionó para que se reconociera y aceptara la raza. La TICA (Asociación Internacional del Gato) finalmente reconoció al Snowshoe a mediados de los ochenta, pero hasta ahora no pertenece a ninguna otra organización.
Salud del gato Snowshoe:
Debido a que el Snowshoe está estrechamente relacionado con el Siamés, existen problemas de salud especiales relacionados con esta raza. Consulte la sección sobre la raza siamesa para obtener más información.